Yo me tengo que desahogar y si lo hago por un blog mucho mejor por mí, no sé quién leerá esto y a cuento de qué, pero desahogarme será lo mejor.
Hay que levantarse temprano esto te da un exceso de pereza, te desmotiva mirar el horario y a primera hora esa asignatura que tanto odias, tus ilusiones quedan por los suelos pero no puedes faltar así que te vistes, hay unos que nos preocupamos del aspecto, otros que cogemos lo primeros y yo desde la noche anterior miro que me pondré. Cogía todo y con malas ganas me vestía, a veces me planchaba el pelo, otras menos o otras simplementes me dejaba el pelo a lo ''leonera''. Desayunamos sin muchas ganas de comer, vamos al baño, nos lavamos los dientes y esperamos a que nos lleven al instituto..
Siempre la misma rutina .. llegas a clase entre tímidez, miradas que haces a todo tu entorno y miradas que recibes tu también. LLegas tarde, miradas asesinas te esperan, miedo al abrir la puerta, segundos de pensamientos ''1,2,3 GRITO''. A lo mejor no pasa nada o a lo mejor te da una charla para que la próxima llegues más temprano.
En clase es peor, tienes que adaptarte a las normas del profesor, estoy lejos de la persona que me hace reir y me entretiene más aunque mi entorno tampoco está tan mal, detrás tengo a la persona más tocaovarios que he conocido en mi vida, Omar. No sé si estamos destinados a estar juntos en mesas pero madre mía, si esto es un destino, para mí más bien es un castigo.
Los profesores te echan broncas, son estrictos y a la mínima buscan fallos, pero no me atrevo a decirle ''Más fallo es ver tu cara todo los días y no me quejo''.
Todos pasamos el instituto, el colegio y tal vez la universidad.. Pero aguantar a el instituto, es algo totalmente dificil.
Educación física, nos hace correr y encima, 5 minutos para bañarnos, creo que me bañé 1 vez por probar algo nuevo y es bastante royo, no me gusta extresarme prefiero un bañito a los gatitos, aguita por la cara y ya.
Siempre soñé con que chicos guapos entraran a mi clase, pero entre más lo sueño, más pesadilla se hace cuando despierto...
No hay comentarios:
Publicar un comentario